Por qué no deberías ignorar tu salud hormonal

Las hormonas juegan un papel muy importante en el cuerpo, siempre se encuentran muy ocupadas viajando por el torrente sanguíneo para avisar al organismo cuando gastar energía para crecer, comer, beber o respirar, es decir que se encargan de llevar mensajes a las células que pueden interpretarlo y llevarlo a cabo. Los cambios en los niveles hormonales son normales a lo largo de la vida de la mujer, por ejemplo: en cada ciclo menstrual, pero también pueden verse alterados por todo lo que nos rodea, como la contaminación del ambiente, radiaciones electromagnéticas, alimentación inadecuada, estrés constante, poca actividad física y ritmos circadianos de sueño y vigilia en constante cambio; en consecuencia, una vida sin equilibrio alimenta al caos en nuestro organismo. 

En años recientes ha aumentado la frecuencia de padecer trastornos hormonales en niñas adolescentes, jóvenes y adultas, por lo que si estas alteraciones no son tratadas pueden resultar en problemas más graves de salud. Padecer un desequilibrio hormonal puede confundirse con otras afecciones comunes debido a los síntomas, por ello es importante acudir con un profesional de la salud que realice un chequeo completo e interprete las pruebas médicas que indicaran aquello que está causando un desbalance y a partir de esto implementar el tratamiento adecuado que te permitirá cambiar tu vida.

¿Qué son las hormonas?

Las hormonas son proteínas producidas por glándulas y tejidos que se liberan al torrente sanguíneo para cumplir su misión como “mensajeros químicos” para transmitir y entregar el mensaje a las células diseñadas para captar y ejecutar la orden recibida, una vez las células realizan la instrucción que les fue entregada comienza un efecto dominó, que se le conoce como vía de señalización celular y que puede afectar la activación de genes, enzimas y canales iónicos (estas son moléculas que tienen una función similar a la de una puerta con código, ya que solo las partículas (iones) que “conocen el código” pueden viajar a través de estas puertas), para finalmente controlar funciones como (Morley, 2019):

• Homeostasis, es el equilibrio químico de todos los sistemas que componen el organismo y que son indispensables para vivir.

• Desarrollo, es el que induce el crecimiento en la niñez y posteriormente el desarrollo del organismo desde la pubertad hasta la madurez física.

• Reproducción, en el caso de los hombres induce la producción de espermatozoides y en las mujeres la maduración de los óvulos y la preparación del útero para cada etapa del embarazo, así como para hacer posible la lactancia materna.

¿Pero de dónde vienen las hormonas encargadas de la regulación de las principales funciones anteriormente mencionadas? Pues se debe a una serie de glándulas repartidas en varias partes del organismo, como puede ser en: 

Cabeza 

• Hipotálamo: esta zona del cerebro conecta el sistema nervioso con el sistema endocrino y es desde aquí que se regula la activación o inhibición de la producción de hormonas de la hipófisis.

• Hipófisis: las hormonas producidas en la hipófisis se encargan de regular al resto de las glándulas del sistema endocrino, por lo que algunos la consideran la glándula más importante.

• Glándula pineal: produce la hormona que regula el sueño, la melatonina.

Cuello

• Glándula tiroidea: las hormonas que produce convierten los alimentos en energía así como también participan en el desarrollo del cerebro y del sistema nervioso.

• Glándulas paratiroideas: ubicadas muy cerca de la glándula tiroidea, se trata de cuatro glándulas cuyas hormonas mantienen el equilibrio del calcio en el cuerpo.

Tronco 

• Glándulas suprarrenales: contamos con dos de estas glándulas, una en cada riñón, las hormonas que produce controlan las sales minerales, el agua, el metabolismo, el sistema inmunológico, la función sexual, la respuesta al estrés.

Órganos sexuales

• Gónadas: estas glándulas en el hombre se encuentran en los testículos y en las mujeres en los ovarios, las hormonas sexuales producidas se encargan del desarrollo sexual y de la reproducción (por ejemplo, en las mujeres regula el ciclo menstrual).

Lo anterior es un gran resumen de lo qué es el sistema endocrino, que como ya podemos darnos una idea es una compleja red de señalizaciones en las que además interviene el sistema nervioso y que tienen la complicada tarea de regular las funciones que nos permiten continuar viviendo.

El desequilibrio hormonal en mujeres

Como anteriormente se había mencionado, las mujeres experimentan de forma natural de varios cambios en los niveles hormonales durante toda su vida, esto es durante la pubertad, el ciclo menstrual, el embarazo, al dar a luz, el periodo de lactancia, la perimenopausia (transición a la menopausia), menopausia y posmenopausia (Huizen, 2021).

Estas fluctuaciones en los niveles hormonales disminuyen conforme la edad aumenta, mientras tanto, los niveles se encuentran en constante cambio debido a los ciclos menstruales, con excepción de aquellas personas que ingieren anticonceptivos hormonales. Pero, sin duda, el cambio más drástico en los niveles hormonales sucede durante el embarazo, ya que el organismo se encarga de crear la placenta, el cual es un órgano y es el encargado de darle oxígeno y nutrientes al feto, también es capaz de secretar progesterona (Toler, 2019).

Sin embargo, es necesario recordar que estos cambios también pueden presentarse debido a un funcionamiento incorrecto de las glándulas endocrinas producto del padecimiento de una afección médica, en el caso de las mujeres, Huizen (2021) menciona que se trata de síndrome de ovario poliquístico (SOP), menopausia prematura, cáncer de ovarios, insuficiencia ovárica primaria (POI), enfermedad de Cushing.

Síntomas que se manifiestan si padeces desequilibrio hormonal

Los síntomas se presentan de forma repentina y afectan la salud en general, siendo los síntomas tan inespecíficos y variados resulta fácil confundirlos con cualquier otro padecimiento, los síntomas que se presentarán dependeran del tipo de hormona que funcione incorrectamente (Huizen, 2021). Algunos de estos síntomas son: 

• acné

• pérdida de cabello

• crecimiento excesivo de vello

• ciclos menstruales irregulares, abundantes o dolorosos

• infertilidad

• fatiga

• estreñimiento y diarrea

• bochornos y sudoración nocturna

• insomnio

• sobrepeso u obesidad

• indigestión

¿Cómo se logra el equilibrio hormonal?

El desequilibrio hormonal es influenciado por los hábitos de estilo de vida y los factores ambientales, estar expuesto al estrés de forma constante, una mala calidad del sueño, poca o nula actividad física y una alimentación inadecuada son ejemplos de lo que debemos evitar para no alterar de forma importante e irremediable tus niveles hormonales.

Controlar los niveles hormonales se puede realizar a través de dos formas: mediante la prescripción de fármacos y cambios en el estilo de vida. 

Algunos tratamientos para las mujeres para tratar las alteraciones hormonales son (Huizen, 2021):

• Anticonceptivos hormonales, son medicamentos que contienen hormonas sintéticas (progesterona y estrógeno) que ayudan a regular los ciclos menstruales.

• Medicamentos de reemplazo hormonal, disminuye por cierto tiempo los síntomas graves asociados con la menopausia.

• Medicamentos antiandrógenos, se encargan de evitar que los andrógenos realicen sus funciones al bloquearlos e impedir que se unan a su receptor, como resultado se impide el padecimiento de acné severo, el crecimiento excesivo de vello y la pérdida abundante de cabello.

• Metformina, reduce los niveles de azúcar en sangre, por lo que se recomienda para pacientes con diabetes tipo 2.

• Levotiroxina, para pacientes con hipotiroidismo.

Por otra parte, implementar cambios saludables en el estilo de vida ayuda considerablemente al equilibrio de los niveles hormonales, es una opción más natural y que sin duda brinda resultados más duraderos, a grandes rasgos incluye: la pérdida de peso, alimentación saludable, aprender a gestionar el estrés y dormir las horas suficientes de forma adecuada (Klepchukova, 2022). 

Diamanti-Kandarakis y colaboradores (2017) explican ampliamente en su artículo sobre cómo el estrés oxidativo (es la formación de radicales libres y que no son esenciales para la vida) impacta fuertemente en la regulación hormonal en las mujeres de forma negativa y esto ocurre debido a la nutrición. Se han realizado diferentes estudios en los que los sujetos recibieron grandes cantidades de comida con alto contenido de lípidos, carbohidratos o proteínas y como resultado obtuvieron una mayor producción de radicales libres. De igual forma, se realizaron estudios para encontrar el tipo de alimentación que ayuda a combatir el estrés oxidativo, encontrando que una dieta restringida en calorías aseguran un balance oxidativo y promueven la longevidad celular; en otra investigación encontraron que pacientes que seguían una dieta Mediterránea por un periodo de tiempo de 3 meses, enriquecida en ácidos grasos monoinsaturados o ácidos grasos poliinsaturados (conocidos como grasas buenas) y polifenoles (mejoran la salud y reducen las enfermedades cardiovasculares), tenían mayores niveles de antioxidantes en plasma y una mejor salud vascular. 

Es por lo anterior que se recomienda comer la cantidad adecuada de alimentos, consumir antioxidantes y antiinflamatorios, e incluso cuidar los métodos de cocción de los alimentos; acompañado de actividad física regular, control del estrés, evitar los alimentos procesados o con mucho azúcar, practicar yoga o meditación y dormir las horas de sueño adecuadas.  

Conclusión

Los procesos que se llevan a cabo en nuestro organismo para que podamos continuar con vida son increíblemente complejos y aún no las comprendemos por completo, ¡y este artículo solo se trató sobre el sistema endocrino! En la literatura se menciona que existen 12 sistemas diferentes. 

Los desequilibrios hormonales pasan desapercibidos, ya que se presentan síntomas comunes que no parecen tener un gran impacto, sin embargo, no deberiamos ignorarlos si se presentan de forma prolongada, por lo que lo mejor es acudir con un profesional de la salud que sea capaz de tratarlo de forma adecuada. Así como también, mantener un estilo de vida equilibrado, físico y mental, se verá reflejado en el estado de tu salud hormonal.

Si te gustaría aprender más respecto al tema de la salud hormonal te invitamos a ver la masterclass “Enfoque nutricional de la salud hormonal: Aprende a usar la prueba de Balance Hormonal”, impartida por Natalia Díaz, nutrióloga de nutriADN.

Referencias

Diamanti-Kandarakis, E., Papalou, O., Kandaraki, E. A., & Kassi, G. (2017). Nutrition as a mediator of oxidative stress in metabolic and reproductive disorders in women. Eur. J. Endocrinol, 176, R79-R99.

Huizen, J. (2021). Qué debes saber sobre los desequilibrios hormonales. Recuperado de: https://www.medicalnewstoday.com/articles/321486

Klepchukova, A. (2022). Desequilibrio hormonal en mujeres: 9 signos de que lo tienes. Recuperado de: https://flo.health/es/tu-ciclo/salud/sintomas-y-enfermedades/desequilibrio-hormonal-en-mujeres

Morley, J. E. (2019). Generalidades sobre el sistema endocrino. Recuperado de: https://www.msdmanuals.com/es-mx/professional/trastornos-endocrinol%C3%B3gicos-y-metab%C3%B3licos/principios-de-endocrinolog%C3%ADa/generalidades-sobre-el-sistema-endocrino

Toler, S. (2019). Lo que debes saber sobre las hormonas. Recuperado de: https://helloclue.com/es/articulos/ciclo-a-z/lo-que-debes-saber-sobre-las-hormonas